Economia

EY se coloca entre los mejores lugares de trabajo para mujeres en la región

·       También figuró en el ranking Mejores Lugares para Trabajar América Latina 2022.

República Dominicana, agosto de 2022. “Como líder mujer en una carrera STEM muchas veces nos enfrentamos a estereotipos de géneros, presión y falta de más mujeres en roles de liderazgo”, relata Monserrat Zúñiga, directora ejecutiva del área de Consultoría de la Firma EY. Monserrat inició como consultora senior en el área de tecnología, dedicándose a la implementación de sistemas financieros.

Actualmente y con más de 10 años de experiencia en la firma, lidera la práctica de transformación de negocios para Centroamérica y Caribe. Asegura que, además de su esfuerzo por crecer profesionalmente, ha contado con el respaldo de una empresa que lleva en su ADN diversidad, inclusión y equidad y una cultura de aprendizaje constante, que impulsa el desarrollo integral y reta a sus colaboradores a seguir creciendo.

Tras finalizar sus estudios universitarios y convertirse en licenciada en Contaduría Pública, Vanessa Fernández se incorporó al equipo de Auditoría EY. Fernández, quien actualmente es socia de Auditoría, afirma que este hito tan importante en su carrera no ha sido casualidad.

“Ha sido un proceso de 15 años; la Firma confió en mi talento y decidió invertir en mi crecimiento profesional; a través del desarrollo de nuevos conocimientos técnicos y de habilidades blandas, también se me ha confiado diversos retos durante mi carrera profesional y un aspecto muy importante es que mis líderes me han brindado retroalimentaciones justas para tener un mejor desarrollo y seguir avanzando mi carrera en la firma”, comentó Vanessa, quien además sostiene que compartir los mismos valores de EY ha permitido que la cultura organizacional de la firma haya contribuido en su desarrollo personal.

De 1.750 colaboradores que EY tiene en la región centroamericana, 800 son mujeres. Sus condiciones de trabajo, beneficios y políticas, así como iniciativas y programas que impulsan para el desarrollo de sus profesionales, convirtió a la firma en uno de los mejores lugares de trabajo para las mujeres, este 2022.  El reconocimiento se destaca en el ranking Mejores Lugares para Trabajar para Mujeres 2022, que el Instituto de Great Place to Work, desarrolla por segundo año consecutivo.

“He experimentado una organización comprometida en construir un mundo de negocios más incluyente para las mujeres y con un compromiso real con la equidad de género. Además, EY Centroamérica es una organización que se caracteriza por ser inclusiva y con políticas de flexibilización que dan mayor oportunidad al desarrollo de las mujeres”, comentó Vanessa.

“En EY cada uno de nosotros tenemos el rol y la responsabilidad de fomentar una cultura donde todas las personas tengan sentido de pertenencia, donde todos podamos traer lo mejor de nosotros al trabajo, desarrollar nuestros talentos y alcanzar nuestro máximo potencial. Haciendo esto ayudamos a revolucionar la forma en la que trabajamos y re imaginamos un futuro mucho más inclusivo dando las oportunidades y herramientas necesarias para crecer personal y profesionalmente”, agregó Monserrat.

De acuerdo con Laura Gómez Villota, Coordinadora de Diversidad, Equidad e Inclusión (DE&I), del área de Talento Humano de EY, la experiencia nace desde el proceso de reclutamiento, ya que se han propuesto garantizar un reclutamiento equitativo, transparente e imparcial donde cada persona tiene las mismas oportunidades de demostrar sus competencias y habilidades.

Inclusive, el equipo de reclutamiento debe realizar un curso que le prepare para realizar las entrevistas a personas candidatas, el cual incluye una sección importante sobre sesgos inconscientes y cómo volverse consciente de ellos para una toma de decisión más justa.

Ya dentro de la fuerza laboral de EY, existe una cultura de inclusión que promueve el balance de la vida para las mujeres, impactando en las familias de sus colaboradores y que se pueden enumerar en las siguientes cinco prácticas:

1.     Flexibilidad de horario: esta necesidad fue mucho más evidente con la pandemia, especialmente para las personas con responsabilidades de cuido de niños o de adultos mayores quienes se enfrentaron a grandes retos para acomodarse a la nueva realidad y atender todas las tareas en un mismo lugar, sus casas.

“En la Firma no se monitorea a qué hora se conectan y se desconectan las personas, nuestras relaciones están basadas en la confianza y se mide en función del cumplimiento de tareas y objetivos”, explicó Gómez.

2.     Licencias de maternidad y paternidad: el apoyo que brinda la Firma a nuevos papás y mamás es muy importante para la etapa de sus vidas que están viviendo. Brindan licencias de paternidad incluso en países donde a nivel de legislación esta figura no existe.

“Esto nos mueve de manera contundente hacia temas de corresponsabilidad. En el caso de mamás, brindamos licencia de maternidad extendida y un esquema flexible de retorno a sus labores, el cual se negocia con el líder de manera personalizada según las necesidades y expectativas de cada mamá”, amplió Gómez.

3.     Programa de mentoría: este programa consiste en la creación formal de relaciones de mentoría entre mujeres mentees y mujeres mentoras. Esta relación se enmarca en un acompañamiento de 6 meses por parte de un consultor externo quienes guían este proceso y que garantiza que se alcancen los objetivos definidos por cada pareja. Entre 2020 y 2021 tuvieron 9 parejas en la región centroamericana, donde 9 mujeres líderes fueron mentoras de 9 mujeres de alto potencial y desempeño de la Firma.

4.     Red de Equidad de Género: esta red profesional fue creada en 2017 y actualmente cuenta con 46 personas miembros. Este grupo brinda la oportunidad de fortalecer habilidades de liderazgo y de exposición a las personas que lideran la red así como, a nivel más macro, el aporte que ofrecen en la construcción de una cultura sensible e inclusiva en temas de género a través de la ejecución del plan de trabajo, especialmente espacios de educación y sensibilización.

5.     Monitoreo y análisis continuo: a través de diferentes herramientas hemos revisado y medido cómo estamos, cuánto hemos avanzado y qué nos falta en busca de una mejora real y continua.

Como parte de sus acciones para combatir la discriminación contra las mujeres, cuenta con una Política de Inclusión y No Discriminación la cual, alineada al Código Global de Conducta, que detalla los comportamientos esperados en sus ambientes laborales, tanto en las relaciones entre su gente, como con sus clientes.  Tiene canales establecidos de denuncia locales y globales como una línea de ética, donde las personas pueden denunciar de manera anónima o no, si así lo desean, si son víctimas o testigos de alguna situación.

“Creemos que la mejor forma de combatir la discriminación de manera sostenida y con un cambio de cultura real, es con educación y sensibilización, que las personas conozcan sobre los sesgos y prejuicios y puedan combatirlos día a día desde sus círculos de influencia. Nuestra satisfacción viene de escuchar a nuestra propia gente decir que valora y agradece formar parte de una organización que abra espacios para este tipo de conversaciones”, determinó la coordinadora.

Desde hace 5 años, anualmente se desarrollan diferentes espacios de sensibilización a través de charlas, talleres, conversatorios y campañas de comunicación, aprovechando fechas especiales como el Día Internacional de la Mujer y el Día Internacional contra la Violencia de Género, en los que voluntariamente participan en promedio unas 350 personas por sesión e involucrando, prácticamente, a toda la representación centroamericana de la Firma líder en servicios de auditoría, consultoría, legal, estrategia, impuestos y transacciones.

“Todas las mujeres actualmente vivimos en una sociedad contaminada de múltiples brechas de género que van desde el ámbito económico, social y político y cada mujer en la sociedad nos debemos enfrentar a estas brechas de una forma directa o indirecta y en mayor o menor medida, según las circunstancias. En lo que se refiere a mi vida profesional la brecha que ha sido más evidente es que los puestos de liderazgo y de toma de decisiones de las organizaciones están asumidos en su mayoría por hombres. De ahí la importancia de que las organizaciones tomen conciencia y planes de acción para ir disminuyendo este tipo de brechas”, aseguró Vanessa.