El lenguaje de la protesta en el marco de los derechos fundamentales
Por Francisco Cabrera Mata
En el orden social, la protesta supone un derecho que hace posible el ejercicio de otros derechos. Es mecanismo de actuación mediante el cual las personas se valen de vías directas para exigir sus derechos, justo cuando estiman ineficaces las demás herramientas de participación. Una forma de visibilizar a los sectores sociales discriminados[1] y que se manifiesta por los diversos modos del lenguaje con que cuenta el ser humano para externar su grito de dolor ante la insatisfacción. Si se quiere, algo así como “autotutela” que, en cualquiera de sus manifestaciones, expone un derecho reconocido por la Constitución y los tratados sobre derechos humanos suscritos por la República.