Cuerpo Diplomático acreditado en Trinidad y Tobago destacan aportes
PUERTO ESPAÑA, Trinidad y Tobago.- El doctor José Serulle Ramia ha sido objeto de una serie de reconocimientos por parte del Estado de Trinidad y Tobago, el Cuerpo Diplomático acreditado allí, el sector educativo y la diáspora dominicana en ese país, donde ha servido como embajador dominicano, durante 11 años y 7 meses.
La Presidenta de la República de Trinidad y Tobago, Excelentísima Paula Mae-Weekes, al recibir en su residencia al Embajador Dr. José Serulle Ramia y a su esposa, Dra. Jacqueline Boin, elogió la labor del diplomático dominicano quien termina su misión en la isla caribeña. La mandataria dijo que Serulle Ramia, por más de cinco años Decano del Cuerpo Diplomático en la isla caribeña de habla inglesa, ha desempeñado sus funciones con un alto grado de dignidad y respeto, a la vez que supo promotor la cooperación entre las naciones caribeñas.
Reconoció los trabajos hechos por el jefe de misión dominicano en Trinidad y Tobago, donde se ha ganado un sitial importante en la sociedad, sus organizaciones educativas, empresariales y gobiernos locales. Deseó un feliz retorno a la República Dominicana.
De su lado, los embajadores acreditados en Trinidad y Tobago, ofrecieron al Embajador Serulle Ramia y a su esposa un almuerzo, en el cual todos los presentes pronunciaron palabras de reconocimiento a la intensa labor desplegada durante tan largo período para estrechar nexos entre su país y la República Dominicana, y también con los países representados en esta nación caribeña..
De su lado, el Embajador de Francia, S.E. Serge Lavroff, quien asume en lo adelante el rol de Decano del Cuerpo Diplomático, realizó una recepción en su residencia, invitando a un Embajador de cada continente, a fin de respetar el protocolo que impone la pandemia de la Covid-19.
El embajador francés expresó su profundo agradecimiento por la larga trayectoria como Decano del Cuerpo Diplomático y los éxitos logrados por el Embajador José Serulle Ramia, catalogándolo de diplomático afable, y promotor de las relaciones de amistad y solidaridad entre los pueblos del mundo.
“Reconozco que escuché siempre con mucha atención, placer e interés tus análisis sobre lo que acontece en esta parte del mundo, compartí tu experiencia enriquecedora, y cómo no, aprecié el entusiasmo y sabiduría de tus propósitos y consejos tan útiles. Once años y siete meses, antes que todo, son 11 años y 7 meses de tu vida, plena e intensamente vivida. Conoces este país como nadie, lo recorriste a fondo de arriba a abajo, y en todos sus aspectos. Eres un orador talentoso pero también un escritor de fuste. Estoy seguro que luego de tu partida encontrarás el tiempo para publicar tus memorias, las de un diplomático experimentado y sabio observador del mundo que nos rodea”, expresó el embajador francés durante el emotivo acto de despedida..
Mientras que el Consejo de la Diáspora Dominicana en Trinidad y Tobago tributó un homenaje al doctor Serulle Ramia, artífice de la entidad que agrupa a los y las dominicanas organizados en esa isla.
Agradecieron su apoyo y estímulos para con la comunidad criolla en Trinidad y Tobago la que oscila entre 8 y 12 mil dominicanos, que trabajan en la construcción, salones de belleza, entre otras actividades productivas.
El sector educativo de la primaria y secundaria de Trinidad y Tobago y el Departamento de la lengua española del Ministerio de Educación de Trinidad y Tobago, dirigido por Nicole Nelson, sostuvieron un intercambio de ideas por más de 90 minutos con el Embajador José Serulle Ramia e hicieron un recorrido de todas las actividades que pudieron en estos más de once años realizar en conjunto a favor de los intercambios de conocimientos. Para dicho sector, las enseñanzas dejadas por el Embajador Dr. José Serulle Ramia permanecerán en el alma de profesores y educando como un legado permanente en pos de la trascendencia del conocimiento de nuestras realidades específicas como pueblos caribeños y como motor de unidad, cooperación y respeto entre nuestras naciones.
De su lado, el Embajador José Arnaldo Serulle Ramia, agradeció todas las manifestaciones de cariño, solidaridad y reconocimientos por los largos 11 años y 7 meses que tuvo como jefe de misión en la nación caribeña. Destacó la labor que llevó a cabo en el terreno de los intercambios comerciales, su presencia en todas las manifestaciones desarrolladas por el Gobierno de Trinidad y Tobago y las asociaciones empresariales y culturales, y recordó el valor de la participación de su país en diez versiones de la Trade and Investment Convention, organizada por la Asociación de Manufactureros y el Ministerio de Comercio e Industria de Trinidad y Tobago. Habló del amplio contenido que tuvo un seminario que se realizara con las autoridades de la isla de Tobago sobre el Turismo Sostenible, el cual arrojó grandes enseñanzas en materia de Recordó las numerosas misiones de intercambios que se realizaron entre las dos naciones hermanas caribeñas y valoró el alcance que tuvo el Primer Festival Internacional del Cigarro dominicano en Trinidad y Tobago, el cual no pudo repetirse en su segunda edición en el 2020 a causa de la Covid-18.
Su entrega como Representante Permanente ante la Asociación de Estados del Caribe fue constante, y en ese escenario promovió con vehemencia la unidad y buena coordinación de los estados Caribeños y sus vínculos con el mundo.
Puso en alto el apoyo que recibió de las autoridades de Trinidad y Tobago, en especial de los Presidentes y Primer Ministros que tuvo el honor de conocer e intercambiar ideas sobre el presente y futuro de la región del Caribe y, de manera particular, entre Trinidad y Tobago y la República Dominicana.
Subrayó con orgullo el rol que desempeñó como educador en Trinidad y Tobago, donde promovió el español y las riquezas culturales y naturales de la República Dominicana en las escuelas, públicas y privadas, y en las universidades, llevando la cultura y las relaciones de amistad entre la República Dominicana y Trinidad y Tobago.
“Agradezco a los miles de niños y niñas, profesores y profesoras trinitarias con las que interactué en las aulas dentro del programa de enseñanza del Español y la Semana Cultural que promovió la Embajada dominicana.
Nunca olvidaré su desvelo por conocer a nuestra patria y a su bello pueblo, y permanecerán en mí sus cánticos de alegría, fraternidad y redención humana”.