Extracto: COP26 representa una enorme oportunidad para que República Dominicana desarrolle una economía verde.

El representante del gobierno de República Dominicana en la cumbre COP26, el Sr. Orlando Jorge Mera, ha anunciado que ha firmado, junto con los representantes de otros 100 países en el evento, la Declaración para la “Acción sobre los bosques y el uso de la tierra”.

Con esta declaración los signatarios asumen el compromiso de detener y revertir la deforestación y la degradación de la tierra para 2030, y acuerdan que se le asigne a este objetivo la suma de 19 mil millones de dólares estadounidenses.

Alcanzar estos objetivos sin dañar la economía de la República Dominicana constituye un desafío importante. Sin embargo, hay algunas áreas en las que República Dominicana podría marcar una diferencia sin dañar su economía.

Reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero

La República Dominicana es una economía en rápido desarrollo, en donde el 100% de su población tiene acceso a la electricidad. Es rica en recursos naturales como ser oro, plata, ámbar, larimar, ferroníquel, bauxita, carbón, estaño, mármol, sal, yeso, pero aún no cuenta con la infraestructura para aumentar su participación en la generación de energía renovable.

Desafortunadamente, la principal fuente de energía en la RD sigue siendo los combustibles fósiles importados.

Como signataria del Acuerdo de París en 2015, la República Dominicana se ha comprometido a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y reemplazarlas con otras fuentes de energía renovable. La cumbre COP26 se propone negociar una declaración similar.

La firma de la declaración de reforestación de COP26 se corresponde con los esfuerzos actuales del país iniciados cuando la República Dominicana se unió al Plan Sierra en 2001. En dos décadas, este plan logró restaurar la forestación a niveles de la década de 1950. Sin embargo, aún debe prepararse un plan para proporcionar fuentes de producción de energía más sostenibles.

Según el informe de IRENA, la República Dominicana tiene el potencial de aumentar la participación en la generación de energía renovable al 44 % para 2030, en base a energía solar, fotovoltaica, eólica y bioenergía.

Además, como informó el informe de la FAO de 2008, los países afrolatino americanos y del Caribe como la República Dominicana, cuentan con el potencial para aumentar la producción de biocombustibles, especialmente biocombustibles de primera generación a partir de aceite vegetal, caña de azúcar o maíz.

Estos esfuerzos podrían tener un enorme impacto positivo para la economía de la República Dominicana, y ayudar a emplazar a la isla por delante de otras naciones en desarrollo, en lo que se refiere a avances en energía renovable.

Transición al ecoturismo y preservación del borde costero

El turismo es uno de los mayores sectores económicos de la República Dominicana, representando en 2019 cerca del 17% del PBI nacional. El turismo también contribuye sin lugar a dudas al daño ambiental, ya que la isla cuenta con cuatro ecorregiones comúnmente visitadas por turistas: áreas de bosques húmedos, bosques secos, pastizales húmedos, sabanas secas y, por supuesto, la costa con sus playas de arena blanca y arrecifes de coral.

El gobierno ya ha realizado esfuerzos para ayudar al sector turístico a operar de manera más sostenible, especialmente mediante la reducción de la contaminación terrestre y marina, de desechos provenientes del turismo y del consumo de materiales.

¿Qué se está haciendo actualmente para limitar el daño ambiental?

En colaboración con el Programa de la ONU para el Medio Ambiente, se han introducido varias acciones para alcanzar estos objetivos.

Por ejemplo, se motiva a los hoteles a que adopten el sistema de refrigeración como servicio, en lugar de utilizar los sistemas de aire acondicionado tradicionales. Esto les permite pagar por la energía utilizada, sin tener que preocuparse por el mantenimiento de los equipos de refrigeración.

Los hoteles también deben reemplazar todos los productos plásticos de un solo uso por otros reciclables o con opción a recarga.

¿Qué aspectos requieren más atención?

El área ambiental que aún requiere más atención es el ecosistema marino a lo largo de la costa terrestre de la RD.

Si bien algunas de estas áreas están protegidas, muchas todavía permiten turistas. El parque nacional subacuático La Caleta, por ejemplo, es un lugar de buceo muy popular entre los turistas locales e internacionales, gracias a sus hermosos arrecifes y embarcaciones náufragas.

Esta área solía ser la fuente de pesca de los lugareños, pero como resultado de la sobrepesca de los últimos años, los pescadores abrieron un centro acuático para turistas, mientras que la pesca se mantuvo como fuente de ingresos de respaldo.

Es primordial la inversión en infraestructura sostenible

Es importante proteger los ecosistemas marinos y costeros, así como invertir en infraestructura sostenible para el desarrollo del ecoturismo local, no solo por razones ambientales, sino también para impulsar la economía local.

Si el desarrollo del ecoturismo local se gestiona adecuadamente, debería contribuir a la reducción del desempleo en el país.

De acuerdo a un estudio por Nuria Navarro, muchos residentes de las áreas protegidas en la República Dominicana no obtienen ningún beneficio del turismo en el área, y siguen viviendo en la pobreza. Por lo tanto, es necesario mantener una estrategia de comunicación adecuada, manteniendo informados a los lugareños sobre el valor del área protegida e integrándolos a los planes de gestión.

A pesar de honorables esfuerzos y algunos recientes éxitos, aún existen muchas lagunas en la estrategia ambiental de la República Dominicana. Se espera que el gobierno las aborde adecuadamente luego de la cumbre COP26.