Una cumbre para todas las personas de América
Brian A. Nichols
Secretario Adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental
Numerosos pacientes dominicanos por COVID-19 están vivos hoy gracias al trabajo de Marizeth Beato. Marizeth es una egresada del campamento de innovación SDQ Creates, lo cual es un programa facilitado por exbecarios YLAI e impulsado por la Embajada de los EE.UU. en Santo Domingo. Gracias a esta experiencia, Marizeth pudo cofundar Open Air DR, un equipo de colaboración que trabaja en el desarrollo de productos de seguridad sanitaria de código abierto y bajo costo para combatir la COVID-19. Además, Marizeth utilizó los métodos que había aprendido durante su participación en SDQ Creates para desarrollar prototipos de ventiladores que no sólo ayudaron a numerosos pacientes infectados del COVID-19 que requerían asistencia respiratoria sino que también suplió a muchos hospitales con ventiladores cuando éstos escaseaban durante los albores de la pandemia.
Juntos, queremos generar más historias como la de Marizeth. Son demasiado pocos los potenciales agentes de cambio y emprendedores en las Américas que pueden hacer realidad sus sueños, debido a la desigualdad en las instituciones públicas, la corrupción, la inseguridad, la atención sanitaria deficiente, los efectos del cambio climático y el acceso limitado al financiamiento.
El presidente Biden recibirá a los líderes del Hemisferio Occidental en Los Ángeles del 8 al 10 de junio para la novena Cumbre de las Américas, con un objetivo ambicioso pero simple: ayudar al hemisferio entero —incluido los Estados Unidos— a materializar su potencial como región donde la democracia responda a las necesidades de todos y las personas puedan hacer realidad sus aspiraciones.
La Cumbre es un encuentro de nuestras sociedades y de nuestra gente. La pandemia de COVID-19 ha cobrado más de 2,7 millones de vidas en nuestro hemisferio y ha provocado un daño económico masivo. La pérdida de puestos de trabajo ha sido particularmente alta para mujeres, trabajadores más jóvenes, personas con niveles de educación más bajos y quienes trabajan en el sector informal. Esta situación se ha agravado aún más debido a la invasión injustificada de Rusia a Ucrania, la cual elevó el precio de productos esenciales que varían desde alimentos y fertilizantes hasta trigo y petróleo en toda América Latina, incluso aquí en la República Dominicana.