Juan Chávez, Director del CONIAF, dice que se necesita financiamiento blando para la tecnificación del campo

Santo Domingo. La aplicación de tecnologías de precisión, como el uso de maquinarias apropiadas y de alta eficiencia, así como de energías renovables en los procesos productivos y de transformación, es el modelo que debe guiar la producción agropecuaria dominicana en el marco de su reconversión para incrementar productividad y garantizar la seguridad alimentaria y la competitividad.

La aseveración la hizo Juan Chávez, director del Consejo Nacional de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (CONIAF), quien afirma que entubar el agua hace más eficientes los sistemas de riego, ya que evitan pérdida del líquido y hacen más eficaz el uso de insumos, aumentando la producción y mejorando la rentabilidad de los cultivos.

Considera que alcanzar los objetivos del Plan Nacional de Soberanía y Seguridad Alimentaria y Nutricional, lanzado el pasado año por el presidente Danilo Medina, y lograr su consolidación, requiere establecer un amplio programa de mejoramiento genético de los principales rubros agropecuarios.

En ese sentido, dijo que se debe aumentar la inversión en la investigación, validaciones y transferencia de nuevas tecnologías para la innovación, al tiempo que propone implementar un sistema de asistencia técnica a los productores sustentado en el uso de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC)

“La sanidad agropecuaria e inocuidad de los alimentos debe ir acompañada de una eficiente regulación del uso y manejo de plaguicidas y fármacos de uso veterinario”, manifestó el funcionario en nota enviada a los medios.

Respecto al mejoramiento genético, dijo que, al igual que otros países, República Dominicana puede alcanzar altos niveles de productividad utilizando la técnica de edición genética, la cual consiste en silenciar, en plantas y animales, genes que confieren susceptibilidad al ataque de plagas y enfermedades, lo que fortalece genes de rendimiento.

Otras innovaciones tecnológicas propuestas por el director del CONIAF para el desarrollo sostenible de la agropecuaria dominicana incluyen la diversificación productiva con validación e introducción de rubros exóticos con potencial de mercado como macadamia, arándano, yaca, canela, pimienta, y otros.

En la nota, Juan Chávez aclara que, para lograr la modernización y reconversión del campo, se hace necesario que el Gobierno especialice un fondo para el financiamiento blando al uso de tecnologías y energías limpias, además de instaurar en el país un programa devuelva en tecnología el dinero recaudado por pago de impuestos a los agroempresarios.